lunes, 17 de noviembre de 2014


Antalogía Poetica

Carpe Diem:
El tópico literario del Carpe Diem me captiva por lo que quiere decir. El motivo de vivir la vida es interesante por que hoy en día la vida suele tener menos sentido y significancia. La gente hoy en día está subestimando la vida en general. Por ende el tópico del Carpe Diem creo que va estimular mi significado de lo que significa “vivir la vida.”

Poema Propio

Pudo ser tu último momento
pudo ser tu último segundo.
Pudo ser tu última jugada
pudo ser tu último partido.
Pudo ser tu último beso
pudo ser tu último relacion.

Uno nunca sabe
lo que pudo ser tu último
por eso vive cada momento
como tu último

Antonio Martínez Cerezo Siglo XXI

Ahora que te aguardan apenas un suspiro,
un aliento de rosas,
no dudes en cogerlas.
Recoge ahora el fruto,
las delicadas bayas de la experiencia.
Resiste.
Resiste a ver ajadas las sendas de las lágrimas,
el dorso de tu seda,
la flor de mi consuelo, tus caricias.
¡Corta las rosas!
Saborea la piel de las manzanas.
Goza.
Goza la soledad,
los parques y las fuentes.
Goza la lectura y las palomas.

Sabemos que mañana será, nadie lo duda,
sólo viaje y océano...
Resiste ante el espejo.
Resiste ante tu rostro a la deriva,
ante los derramados sauces de tus caderas.
Recolecta las rosas.
Recolecta las rosas de tu invierno.


Severino Nieto Barea Siglo XXI

Malgastarás de amor todas las tardes
mientras insistas tanto en tu porfía
de no fiarle nada a este presente.
Te engaña la esperanza cuando piensas
que volverá mañana el mismo día.
Debes saber que el tiempo no perdona:
se quedarán tus manos como escarcha,
será tu boca sólo triste mueca,
tu piel, bocado ansioso de manzana,
se exiliará de todos los espejos.
No seas tan absurda, goza, tonta.
Aún tenemos tiempo
antes de que tu hermano
regrese de la escuela.


Miryam Librán Moreno Siglo XXI

Mantén la rosa
viva en tu memoria:
no la coseches.
Laura Martínez González
Mira a tu alrededor y recoge
cada uno de los frutos que te da la vida.
No esperes el mañana
porque tal vez nunca llegará.
Guarda cada una de las uvas de tu viña
y forma en tu alma ese racimo
de ilusiones y momentos de placer.
Disfruta del momento de pisarlas
y sacar de ellas el mejor de sus jugos
porque recuerda que el tiempo
deja su huella
que aparecerá en tu rostro
en forma de surco.
Vive, pues, el momento
para no dejar en el recuerdo
una cosecha olvidada
por el paso del tiempo.

Gabriel Laguna Mariscal Siglo XXI

Estoy contigo, y no siento deseo
de cosechar el tiempo fugitivo,
ni deshojar la rosa caediza,
ni de hacer cábalas con días venideros.
No hay futuro contigo, ni pasado,
no tengo prisa, ni miedo ni esperanza,
estar contigo y ser dios es todo uno.
Vivir, un siempre eterno todavía.
Me iré, lo sé: ni busco ni rehúyo
dejar de ser, y cuando tenga
que abandonar esta sala de candelas de oro,
saldré como el comensal ahíto
que se marcha de un banquete tras los postres.
Y no me engaño recolectando días,
boniatos, edades, ajos, mocedades, zanahorias.
Mientras hablamos, sé muy bien
que habrá huido el tiempo, el muy cabrito.
Pues no me da la gana perseguirlo.


Encarnación Laguna Mariscal

Carpe Diem, si te pienso
no te cumplo. Si te nombro,
ya te pierdo.
Y por ello, yo prefiero
no pensarte, no saberte
y sí tomarte.

María Cope Gil

Hoy te amaría de carne,
de hueso.
Te cubriría de aromas ávidos
de sexo.

Hoy humedecería tu cuerpo,
amasaría recuerdos y deseos.
Hoy lo daría todo por ser
tu sueño.

Hoy te amaría de frente
y de perfil.

Hoy, para rozarte, me haría viento,
para quemarte, fuego,
para cubrirte, cielo,
para estremecerte, verso.

Matilde Aguilar Medina Siglo XVII

Arranca las rosas y no esperes,
ni el pasado que fue lamentes.
Goza y mientras puedas siente
porque si el tiempo un círculo fuese,
un eterno retorno en devenir
donde el pasado aún no es,
donde el futuro ya lo fue,
entonces, no olvides vivir
el eterno momento que es.

INSTANTES


Si pudiera vivir nuevamente mi vida,
en la próxima trataría de cometer más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido,
de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad.
Sería menos higiénico.
Correría más riesgos,
haría más viajes,
contemplaría más atardeceres,
subiría más montañas, nadaría más ríos.
Iría a más lugares adonde nunca he ido,
comería más helados y menos habas,
tendría más problemas reales y menos imaginarios.
Yo fui una de esas personas que vivió sensata
y prolíficamente cada minuto de su vida;
claro que tuve momentos de alegría.
Pero si pudiera volver atrás trataría
de tener solamente buenos momentos.
Por si no lo saben, de eso está hecha la vida,
sólo de momentos; no te pierdas el ahora.
Yo era uno de esos que nunca
iban a ninguna parte sin un termómetro,
una bolsa de agua caliente,
un paraguas y un paracaídas;
si pudiera volver a vivir, viajaría más liviano.
Si pudiera volver a vivir
comenzaría a andar descalzo a principios
de la primavera
y seguiría descalzo hasta concluir el otoño.
Daría más vueltas en calesita,
contemplaría más amaneceres,
y jugaría con más niños,
si tuviera otra vez vida por delante.
Pero ya ven, tengo 85 años...
y sé que me estoy muriendo.


Walt Whitman Siglo XIX

Aprovecha el día de hoy.
No dejes que termine sin haber crecido un poco, sin haber sido feliz,
sin haber alimentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento. No permitas que nadie te quite el
derecho de expresarte, que es casi un deber.
No abandones tus ansias de hacer de tu vida algo extraordinario…
No dejes de creer que las palabras y la poesía, sí pueden cambiar al
mundo; porque, pase lo que pase, nuestra esencia está intacta.
Somos seres humanos llenos de pasión, la vida es desierto y es oasis.
Nos derriba, nos lastima, nos convierte en protagonistas de nuestra
propia historia.
Aunque el viento sople en contra, la poderosa obra continúa. Y tú
puedes aportar una estrofa…
No dejes nunca de soñar, porque sólo en sueños puede ser libre el
hombre.
No caigas en el peor de los errores: el silencio. La mayoría vive en un
silencio espantoso. No te resignes, huye…
“Yo emito mi alarido por los tejados de este mundo”, dice el poeta;
valora la belleza de las cosas simples, se puede hacer poesía sobre las
pequeñas cosas.
No traiciones tus creencias, todos merecemos ser aceptados.
No podemos remar en contra de nosotros mismos, eso transforma la
vida en un infierno.
Disfruta del pánico que provoca tener la vida por delante.
Vívela intensamente, sin mediocridades.
Piensa que en ti está el futuro, y asume la tarea con orgullo y sin
miedo.
Aprende de quienes pueden enseñarte. Las experiencias de quienes se
alimentaron de nuestros “Poetas Muertos”, te ayudarán a caminar por
la vida.
La sociedad de hoy somos nosotros, los “Poetas Vivos”.
No permitas que la vida te pase a ti, sin que tú la vivas.


Eclesiastés, 9, vs. 8-11 Siglo X a.C.

lleva siempre vestidos blancos y no falte el perfume en tu cabeza, disfruta la vida con la mujer que amas, todo lo que te dure esa vida fugaz, todos esos años fugaces que te han concedido bajo el sol; que esa es tu suerte mientras vives y te fatigas bajo el sol

Horacio Siglo I a.C.

No preguntes (es sacrílego saberlo) qué fin a mí, cuál a ti,
los dioses han dado, Leuconoe, ni sondees los babilónicos
números. ¡Cuánto mejor es soportar lo que haya de ser!
Así Júpiter nos haya concedido muchos inviernos, así este sea el último
que ahora desgasta contra los escollos sobresalientes las olas
del Tirreno: sé sabia, filtra el vino y en un espacio breve
recorta una esperanza larga. Mientras hablamos, habrá huido celosa
la edad: aprovecha el día, confia lo menos posible en el mañana.


Décimo Magno Ausonio Siglo IX

Apenas tan larga como un solo día es la vida de las rosas;
tan pronto llegan a su plenitud, las empuja su propia vejez.
Si vio nacer una la aurora rutilante,
a esa la caída de la tarde la contempla ya mustia.
Mas no importa: aunque inexorablemente deba la rosa rápida morir,
ella misma prolonga su vida con los nuevos brotes.
Coge las rosas, muchacha, mientras está fresca tu juventud,
pero no olvides que así se desliza también tu vida"

Don Luis de Góngora y Argote Siglo XV

Mientras por competir con tu cabello,
oro bruñido al sol relumbra en vano;


mientras con menosprecio en medio el llano
mira tu blanca frente el lilio bello;
Mientras a cada labio, por cogello,
siguen más ojos que al clavel temprano;
y mientras triunfa con desdén Lozano
del luciente cristal tu gentil cuello:
Goza cuello, cabello, labio y frente,
antes que lo que fue en tu edad dorada
oro, lilio, clavel, cristal luciente,
No sólo en plata o viola troncada
se vuelva, mas tú y ello juntamente
en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.